La princesa y sus amigos junto con otros miembros de la
corte tenia que viajar para resolver unos asuntos, Los únicos que no viajaban
fueron la bruja, porque tenia otro viaje programado para reunirse con otras brujas
durante San Juan y días cercanos ala fecha; el incubo que estaba cortejando a
una anjana muy amiga del ángel, que los presento y el incuso fue a por ella, la
unión no hacia mucha gracia al ángel. Pasaron todos las noches del viaje en la
misma posada, Las dos marquesas dormían en la torre mas alta y sus aposentos
mas amplios, la duquesa dormía en sus
aposentos con la incuba que vigilaba por si algún hombre dormía se atrevía
apertura el sueño de la marquesa y el ángel
con la princesa vigilando por si algo le pasaba, el demonio dormía en el
piso inferior cerca del establo vigilando los monturas con un elfo muy pícaro
muy amigo del ángel, tal vez demasiado.
Todo iba bien para ellos, durante el día el ángel solía
estar con el elfo dirigiendo la marcha o se retrasaba para hablar con los
marquesas, la princesa y el demonio eran muy felices estos días y la duquesa y la súcubo acabaron poniéndose
enfermas impudentes.
La última noche, todos se reunieron en los aposentos de la
princesa para hablar de aquel viaje. Al terminar cada uno se fue a sus
aposentos a excepción de la princesa que se fue a los del demonio y el que se
quedo con el ángel y el elfo ya había aporreado y casi tirado la puerta de la
habitación donde el ángel se estaba preparado para la cena lo que se pidió a la
princesa y aun mas cuando supo que el ángel había entrado con el elfo en sus
aposentos…… respuesta del ángel: lo mismo que tu con el demonio. Secretos de
amigas y risas de las dos. Se terminaba el viaje y tenían que volver al reino,
a excepción del ángel que tenia que ir La Tierra de los Ángeles.
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